Alfabeto que no llega a la i.


Como dijo Vasaris… "Sin reconocimiento, sin un trato digno, no hay calidad"

Y ¡boom!, de pronto aterriza en nuestras manos una edición impresa donde la unión del texto con la ilustración, más que pretender reivindicarse en solitario, evocan al poder que juntos pueden llegar a tener: tanto la imagen como la palabra reforzadas mutuamente por su inmediatez.

Con el texto de Bernardo Atxaga y los dibujos de Isidro Ferrer, en 32 páginas y 2 tintas sobre papel vegetal, han conseguido reforzar el ensamble gráfico y literario, creando una historia donde la metáfora y los aforismos son protagonistas elementales del libro grapado que la Federación de Asociaciones de Ilustradores Profesionales (FADIP) hizo realidad física en el 2001.


Constantemente vemos remitiendo de un sitio a otro como principio de trasvisualidad, entendiendo textos e imágenes que nos conducen a una comprensión más global que a su vez nos remite a diferentes autores, fenómenos o cualesquiera de las obras en la Historia del Arte. Atxaga y Ferrer han aunado sus destrezas para enfocar el talento en este proyecto a la defensa del autor y a la relevancia de esta dualidad imagen-texto, palabra-idea gráfica; porque ya se lo preguntaría Alicia en sus maravillas: ¿de qué sirve un libro si no tiene dibujos o diálogos?


Bernardo e Isidro han dejado impreso lo que podría entenderse como un manifiesto de acción, donde aprovechan el medio —y las habilidades técnicas—, para dejar claros los puntos que requieren ser valorados por quienes solicitan el trabajo tanto del escritor como del ilustrador; puntos que aquellos que se dedican al oficio también tienen claramente afirmados: el respeto hacia su oficio, el reconocimiento y el trato digno. 


Más allá del fondo y la práxis, la edición ha sido cuidada y mimada en sus detalles. Si puedes hacerte de una copia, es recomendable que lo hagas, de no ser posible, te invitamos a echar un vistazo a la web de Isidro Ferrer y Bernardo Atxaga.

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